El contrato de locación de servicios es una de las figuras más utilizadas en el mundo empresarial, especialmente entre emprendedores y pequeñas empresas que requieren de servicios profesionales específicos. Este tipo de contrato establece una relación en la que una persona (locador) se compromete a realizar un servicio o trabajo a favor de otra, persona o empresa (locatario), sin que exista una relación laboral de subordinación, lo cual lo diferencia de un contrato de trabajo tradicional.

En el Perú, este contrato es clave para evitar confusiones sobre los derechos y obligaciones de las partes involucradas. Imagina que el contrato es el puente que conecta las expectativas del locador y locatario, asegurando que ambos cumplan sus roles sin interferir en la independencia del profesional que presta sus servicios. Es como establecer los límites de un mapa para saber exactamente hasta dónde llega la responsabilidad de cada uno.

Vamos a detallar los puntos más importantes de este contrato y cómo puedes utilizarlo de manera efectiva en tu empresa o área administrativa.

¿Qué es un locador de servicios?

Un locador de servicios es una persona natural o jurídica que presta servicios a otra persona o entidad, generalmente en forma independiente, sin estar sujeto a una relación laboral.

En este tipo de contrato, conocido como contrato de locación de servicios, el locador se compromete a realizar determinadas tareas o servicios a cambio de una contraprestación económica (honorarios), sin que ello implique subordinación o dependencia con el contratante.

¿Qué es un contrato de locación de servicios?

En términos simples, el contrato de locación de servicios es un acuerdo entre dos partes donde una se compromete a prestar un servicio específico a cambio de una retribución. Es importante destacar que, bajo este tipo de contrato, no existe una relación laboral, es decir, el prestador del servicio no está sujeto a horarios, órdenes o jerarquía dentro de la empresa contratante. Es como si el locador navegara libremente, mientras sigue la ruta establecida en el contrato.

Según las leyes peruanas, este tipo de contrato se rige por el Código Civil, Artículo 1764 lo que otorga una flexibilidad tanto al prestador del servicio como a la empresa que contrata, asegurando una relación clara y bien definida desde el inicio.

El artículo 1764° del Código Civil establece que por la locación de servicios el locador se obliga, sin estar subordinado al comitente, a prestarle sus servicios por cierto tiempo o para un trabajo determinado, a cambio de una retribución.

SUNAT: https://www.sunat.gob.pe/legislacion/oficios/2002/oficios/i3092002.htm

¿Cuánto tiempo puede durar un contrato de locación?

La duración de un contrato de locación de servicios puede variar dependiendo de las necesidades del locatario y la naturaleza del servicio a realizar. En Perú, no existe una restricción legal específica sobre la duración del contrato, lo que significa que puede acordarse por un tiempo determinado o hasta la finalización de un proyecto específico.

Es como un camino con un destino claro, pero con la flexibilidad de ajustar el recorrido si es necesario. Ambos pueden establecer una fecha límite, o simplemente definir que el contrato finaliza cuando se cumple con el objetivo pactado. No obstante, es fundamental que se especifique claramente en el contrato las condiciones de su finalización para evitar malentendidos.

Errores frecuentes de la locación de servicios

El contrato de locación de servicios es una herramienta fundamental para muchas empresas. Sin embargo, es crucial que se redacte con sumo cuidado para evitar que las autoridades laborales interpreten esta relación como un vínculo de subordinación.

Es momento de detallar los aspectos esenciales que las empresas deben considerar para mantener claras las diferencias entre un contrato de locación y una relación laboral tradicional.

1. Plazo definido y razonable

Es recomendable que los contratos de locación de servicios establezcan un plazo determinado que se ajuste a la naturaleza del trabajo. Cuando un contrato carece de plazo o este es desproporcional al servicio ofrecido, las autoridades podrían interpretar que el locador cumple un rol permanente dentro de la empresa. Es como dejar que el viento decida la duración del viaje, algo que puede desviar la ruta hacia malentendidos legales. Un plazo razonable, por el contrario, asegura que el contrato refleje la temporalidad y especificidad del servicio contratado.

2. Evitar proporcionar herramientas de trabajo

Los locadores de servicios, por su carácter autónomo e independiente, deben asumir la provisión de sus propias herramientas de trabajo. Si la empresa otorga elementos como celulares, laptops o correos electrónicos corporativos, se podría interpretar que el locador está integrado a la estructura organizativa de la empresa, como un trabajador más. Proveer estos recursos es como entregar el timón de la embarcación, sugiriendo una dirección que no es propia de un servicio autónomo.

Es esencial que el locador utilice sus propios recursos para mantener su independencia, lo que refuerza la naturaleza no laboral del contrato.

3. Libertad de horario en la prestación de servicios

Una de las diferencias clave entre un locador y un trabajador subordinado es la flexibilidad de horario. El locador debe tener la libertad de gestionar sus propios tiempos, sin la imposición de un horario fijo. Al imponer restricciones de tiempo, se corre el riesgo de que la relación sea vista como una relación laboral. Dejar al locador definir su propio itinerario es como permitir que trace su propio camino, sin las barreras de un horario establecido.

4. Mantener la relación sin subordinación

Si bien la empresa y el locador deben coordinar ciertos aspectos del servicio, esta coordinación no debe transformarse en subordinación. Es fundamental que en la práctica diaria se eviten indicios de jerarquía o dirección. Las instrucciones deben ser como un mapa de sugerencias, no como órdenes que determinen cada paso a seguir. Un buen punto de partida es revisar el tono de los correos electrónicos y las comunicaciones entre las partes, asegurándose de que reflejen una relación horizontal y autónoma

Modelo de contrato de locacion de servicios

Si estás buscando una manera clara y eficiente de formalizar la contratación de servicios independientes, este modelo de contrato de locación de servicios es la herramienta que necesitas. Este tipo de contrato permite que una persona o empresa contrate a un profesional para que preste sus servicios de manera autónoma e independiente, sin generar una relación laboral directa, todo a cambio de una compensación acordada como honorarios.

Modelo de contrato por locacion de servicios en word

Modelo de contrato por locacion de servicios en word

Con este modelo podrás asegurarte de cubrir todos los puntos clave de un contrato de este tipo: desde las obligaciones de ambas partes, hasta las condiciones de pago y finalización del servicio. ¡Olvídate de las confusiones y asegúrate de proteger los intereses de tu negocio!

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